Miami, 20 de mayo de 2022
Las organizaciones Outreach Aid to the Americas (OAA), Prisoners Defenders (PD) y Gremio Médico Cubano Libre (GMCL) han presentado esta mañana en Big Five Club (Miami) una iniciativa colectiva que profundiza en las consecuencias de la aplicación de la “Ley de los 8 años” tanto en los profesionales de la salud a los que les es aplicada, como a sus hijos y demás miembros de la familia, que también la sufren debido a la separación forzosa impuesta por el gobierno cubano.
El informe expuesto por el presidente de Prisoners Defenders, Javier Larrondo, ha sido elaborado en base a un análisis cuantitativo y cualitativo sobre 191 testimonios de médicos —el 76% de ellos considerados ‘desertores’ por el gobierno cubano—, y arroja datos inquietantes: el 83% de los hijos de los profesionales consultados eran menores cuando comenzaron su última misión, de estos menores, 3 de cada 10 niños tenían entre 0 y 5 años; el 26% de estos profesionales no han vuelto a ver a sus hijos nunca más.
Esta separación forzosa ha afectado a los hijos de estos profesionales en distintas áreas sanitarias: un 70% han sufrido daños emocionales, un 60% ha padecido daños psíquicos, y aproximadamente el 25% de estos niños tiene secuelas mentales/cognitivas y físicas.
Uno de esos hijos es Miguel García Román, hoy un joven médico activista del Gremio Médico Cubano Libre que ha ofrecido su testimonio relatando cómo sufrió las consecuencias de vivir sin su padre, también médico de ‘misiones’ durante 11 años, padeciendo daños emocionales, psicológicos, carencias afectivas e incluso bullying por parte de sus compañeros en la escuela.
También ha intervenido el Dr. Roberto Organero, quien afirma que “cuando naces en Cuba te conviertes en una herramienta del sistema y estás obligado a ser un adepto, y si no lo haces eres un traidor. Tienes que ir siempre con tu máscara, y te acostumbras a vivir en ese sistema de doble moral”.
“Si ustedes entienden que todo este sufrimiento de los niños de los médicos cubanos, por sus problemas psicológicos, por las afecciones psicosomáticas que los llevan a retraso en el crecimiento y a todas esas enfermedades, ayúdenos con esta denuncia”, pidió el Dr. Organero.
Desgarrador el testimonio de la Dra. Idalma Leyva, “víctima de la esclavitud, trata de personas bajo el disfraz de Misiones Medicas”, según ella misma afirma; la Dra. Leyva quiere dar voz a los miles de testimonios que, por miedo, no quieren hablar. “A partir del momento en que me declararon desertora, comenzaron las amenazas, las represalias contra todos los colaboradores, pero nunca pude imaginar el sistema macabro que había detrás de todo eso… lastimando lo más profundo que tenemos, que son las familias”.
La Dra. Leyva asegura que los agentes del régimen cubano se lanzaron contra sus familias en Cuba cuando no regresaron tras sus misiones, por lo que fueron amenazados, adultos y niños: “No vas a ver nunca más a tu madre”; incontinencia urinaria en los menores, bullying, provocaciones en la calle, familias monitoreadas por la seguridad del estado, todos los movimientos controlados… es el día a día de las familias de los considerados ‘desertores’ por el régimen de La Habana.
“Ellos usurparon la infancia de nuestros niños, fue un experimento bien macabro, bien cruel; Hoy reclamo justicia, que caiga sobre todos los ejecutores de la esclavitud moderna el peso de la Ley”, afirma Idalma.
Por último, intervino el Dr. Miguel Ángel Ruano Sánchez, médico cubano Neuro Rehabilitador en Colombia, con un emocionado testimonio dedicado a las pérdidas humanas de médicos en las misiones.
“Llevo 20 años separado de mi familia , mi padre hace 2 años murió en Cuba, no pude acceder a Cuba, me devolvieron. Mi madre murió en Cuba el 14 de diciembre y tampoco pude ir a su funeral ni a su cremación”, asegura el Dr. Ruano.
Totalmente de ACUERDO.
Es un crimen de lesa humanidad,impedir que un padre vea a su hijo durante 8 años…